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domingo, 21 de diciembre de 2008

Carta a Papá Noel

Nunca le escribí una carta a Papá Noel, estaba feliz de cualquier regalo que me trajera.
Recibí un bebé de Joli Bell, un robot, una guitarra de juguete, un órgano, la fábrica de los Pitufos, toallitas diminutas que se agrandaban con el agua, bombachas, ropa y hasta un billete de lotería.
No importan los regalos. Creo...no sé. Me parece que a los chicos no les importa cuál sea el regalo. Por lo menos a mis hermanas y a mí no nos importaba. Era la idea de esperar hasta las 12.00 de la noche. Magia. Expectativa. Vestirse prolijo para una fiesta. Comer rico. Bridis: chin chin y finalmente los regalos!!! Después cañitas voladoras, estrellitas y chasqui bum. Y vuelta a jugar con los regalos nuevos.

La cocinita de la foto no me la regaló Papá Noel, es un regalo que me trajo mi tía Cholita con mi abuela de un viaje. La última vez que fui a Bahía Blanca la encontré, le faltaba el vidrio a la puertita y mi mamá en un abrir y cerrar de ojos se lo colocó (le sacó el vidrio a un portaretratos).
En esa cocina jugamos años "horneando" tortas de barro, inventando perfumes de lavanda y cedrón. Para mí esa cocina era enorme. La mejor cocina del mundo. Me sorprendí al reencontrarme con ella y descubrir que no me llegaba siquiera a las rodillas.

Para todos les deseo Felices Fiestas!!!


(Tengo un problemita con la compu, se me cuelga seguido y se me complica postear, mil perdones!)

4 comentarios:

Blue Fairy meets Gepetto dijo...

que linda cocina y que hermosos recuerdos!
yo estoy todavia viendo que comprarle a mis hijos, que dificil. todo caro, ya veremos comos los conformo con algo mas economico pero con todo el corazon incluido.
besos y felices fiestas!

Cassandra Cross dijo...

Qué buenísimo volver a leerla en ocasiones como ésta!
Esos juguetes que ya no se hacen... ¡Qué bellos recuerdos!

Salutes navideños!

DINA LAFONT dijo...

Creo que nunca creìmos en Papà Noel, o por lo menos sospechàbamos de su existencia...por eso no pedìamos nada porque intuìamos como era el asunto.Aunque nos hicieron bien el cuentito del ratòn Pèrez, o por lo menos, eso es lo que recuerdo.

Anónimo dijo...

Hermoso blog. Es bueno saber que muchos comparten la nostalgia y la pasión por el retro.

Un abrazo,
Juan