Páginas para mí

Con este libro aprendí a leer.
Y la maestra, a la marchanta, nos tomaba lectura en voz alta .Y a pesar de que no me costaba leer y de que ensayaba en mi casa , yo me moría de vergüenza si me tocaba. El corazón me latía al galope y los ojos me empezaban a llorar, y de a poquito se me empezaba a nublar la vista y las letras borrosas y la voz del que leía, lejana, como si escuchara bajo el agua y entonces, decían mi nombre, e imaginaba que tartamudeaba y todos se reían. Y Gustavo D, que leía de corrido y con sentimiento, también se reía, y a mí se me desinflaba el corazón.
Nunca me pasó. Pero cada vez que "la seño" tomaba lectura, yo imaginaba todo esto.

Super Cumpleaños

Es verdad que todo depende de la paciencia, espacio disponible, y dinero de los padres.
Cuando era chica no existían las Casitas de Fiesta, por eso no teníamos límite de horario, la fiesta terminaba cuando se hacía de noche. Como tengo una hermana melliza que iba a otro grado diferente, nuestro cumpleaños era el acontecimiento del año ya que se juntaban a jugar chicos de dos cursos distintos. Y todo doble: dos tortas, dos piñatas.
Mi hermana mayor organizaba juegos, mi mamá (experta cocinera autodidacta) convidaba a grandes y chicos con cosas ricas. La mesa con la comida y las sillas se ponían en el garage, ambientado con guirnaldas y carteles. Y nosotros jugábamos en el patio. Y todos chochos.

Palabras

Palabras que usé toda mi niñez y que tuve que dejar de decir cuando vine a Buenos Aires porque se prestaban a confusión; de vez en cuando se me escapa alguna...
Acá va una mini lista con su correspondiente remplazo:

_ Celoplín o Cintex reemplazado por Cinta Scotch.
_ Lanzaminas por Portaminas.
_ Cufa por Traga.
_ Chuflín o Colita por Gomita para el pelo.
_ Carasucia por Tortita Negra.
_ Masitas por Galletitas.

Para mí era así: masitas (Melba, Chocolinas, etc.), galletitas (las de agua), masitas secas (las que se compran en confitería pero sequitas -sin crema, etc.-), y masas (las de confitería éstas sí con crema, chocolate, frutillas, ultra elaboradas). Ah! y los churros siempre, siempre, rellenos de dulce de leche.

MISIÓN ESPACIAL

Tal vez algún niño haya soñado con ser astronauta, y viajar en la inmensidad del espacio, ver las estrellas de cerca y los relieves de la luna. En sentirse ligero y jugar como se salta en el agua, pero por más tiempo hasta casi volar. Quizá algún niño haya querido ponerse alguna vez un traje espacial grandote y plateado para manejar una gigantesca nave con miles de botones con lucecitas de colores que solo él hace funcionar.



Misión Espacial, Colección Centella, Editorial Atlántida, 1983, impreso en Colombia. Ilustrado por Terry Pastor, diseñado por John Strejan, ingeniería de papel James Roger Diaz.

Musicuento

Con voz de tenor cantaba "Vengan a mi..."
Y como si fuera Shakespeare para niños, los clásicos infantiles nos iniciaban en la muerte, la traición, la crueldad, el amor.
Cuánta belleza.

La casa de Pehuen-co

Cachetazo de palabras con voz de asco dice: deprimente la cocina, muy vieja, los muebles, la alacena... y sale ojoteando corto y rapidito en busca de otra casa para alquilar. De pronto el viento despabila las cortinas, y todo se llena de olor a pinos y mar. Es la casa que respira aliviada.
Mucha historia tiene esta casa. Más respeto.




Casa de familia. Casa de playa. Felicidad. Vacaciones.
Cocinita a leña. Ahora a garrafa. Molino de agua. Testigo mudo.
Y crecen los pinos. Y crecemos nosotros.
Antes, risas de niños, ahora, ironías de adultos.

Chiquitita

Así como me gustaba Rafaela Carrá y su sacudón de cabello, adoraba la música de ABBA, con sus pegadizos y armoniosos coros y el glamour de la música Disco.
Un fibrón, una cuchara de madera, un desodorante, cualquiera de ellos servía para hacer de micrófono. Y la música se apoderaba del cuerpo y a veces salía en alaridos que rebotaban con los saltos histéricos de las canciones, y otras veces, con mi hermana éramos las Reinas de la Mímica y cantábamos frente a cualquier espejo transformándonos en mascaritas de drama.



Hace unos diez años la magia del cine me hizo revivir las canciones con la película dramática El Casamiento de Muriel, este año, la exitosa obra de teatro Mamma Mia, será estrenada en los cines. Habrá que verla y bailar en las butacas.

Sinopsis: La protagonista está a punto de casarse y nunca supo quién es su padre. En secreto envía invitaciones a tres ex novios de su madre ( y posibles padres) para que asistan a la boda.


Alguito más:cuando era chica nunca alcancé a ver un video de ABBA. Encontré éste y es genial,comienza muy gracioso. Para saltar de la cama e ir con una sonrisa a trabajar. Para mí era la canción del "chiqui chan, chiqui chan, chiqui chan" (era muy niña y ese título-trabalengua era pura musiquita).